La reforma al Código Procesal Laboral en Costa Rica entre 2015 y 2017 permite adentrarse en la forma en que se afrontan las crisis y se construyen los pactos en ese país. La tesis fundamental de este artículo es que esa reforma responde a un histórico estilo político costarricense que privilegia los pactos intra- e interclasistas y, con eso, la ampliación de las instituciones democráticas. Se trata de un estilo político que permite resolver y prevenir crisis sociopolíticas y evitar la radicalización.